La Escuela-Refugio de Alquézar busca conciliar en un solo edificio diferentes necesidades: por un lado, disponer de un espacio para alojar variados perfiles de usuarios (montañeros, escaladores...) y por otro lado crear un lugar idóneo para la realización de ciclos formativos y actividades, para lo que se ha dotado a las instalaciones de todos los recursos adecuados,todo ello sin perder de vista la orientación deportiva del edificio.

La Escuela-Refugio dispone de dos plantas de habitaciones con una capacidad total de 75 plazas. La distribución de las mismas se realiza en habitaciones de 2,3,4 y 8 personas en literas independientes, equipadas con sábanas y toallas. Para aquellas habitaciones que no cuentan con aseo propio, hay aseos y duchas comunitarios tanto para hombres como para mujeres situados en los extremos de la zona de habitaciones.

El Salón de Actos de 50 plazas y el Aula de 25, están equipadas con todo tipo de recursos audiovisuales para la formación y la divulgación, como cañones para imágenes, proyectores de diapositivas y transparencias, así como aparatos de vídeo, DVD y televisión.

La Biblioteca cuenta con una completa colección de libros y revistas especializados tanto en temas de montaña como del deporte en general y desempeña además las funciones de sala de estudio.

Como no podia ser de otra forma cuenta con un rocódromo. Tiene una altura máxima de 12 metros y dispone de 104 metros cuadrados de superficie escalable, entre muros verticales e inclinados. El usuario dispone también de boulder abatible de 16 metros cuadrados y zona para maniobras con cuerdas, todo esto lo hace una instalación ideal tanto para el entrenamiento, como para la competición y la docencia. Está situado en un edificio anexo a la Escuela-Refugio.

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